La ginecomastia es, prácticamente siempre, una enfermedad congénita por una sobrecarga de hormonas que produce un aumento de volumen de las glándulas mamarias en el hombre. También puede estar provocado por problemas hepáticos como la cirrosis, o como consecuencia de algunas medicaciones.
Lo que es más extraño es que el enfermo en cuestión lo provoque. Pero es posible, y lo más común es que se produzca por un consumo excesivo (en ocasiones simplemente con el consumo, sin excesos) de anabólicos químicos utilizados en la halterofilia para conseguir definir más rápida y eficazmente el cuerpo. La obsesión con la forma física perfecta puede llevarnos a consumir distintas sustancias nada recomendadas que deberíamos evitar a toda costa.